¿Alguna vez han deseado una varita mágica? Yo sí, pero me di cuenta de algo…..
Hace unos días, estuve pensando en diversos sucesos que me han pasado a través del tiempo y me han hecho analizar que como seres pensantes que somos, no necesitamos tener una varita mágica para realizar las cosas. Y no me refiero a una varita mágica para tener un pote de oro o tener un vestido deslumbrante.
Me di cuenta que nosotros somos esa “varita mágica”. Nosotros tenemos la capacidad de pensar antes de hablar y basado en nuestras experiencias, podemos analizar, ¿qué pudiera pasar antes de decir las cosas? Solo toma unos segundos. Se pueden decir cosas maravillosas, lograr momentos espectaculares o también evitar malos ratos que pueden traer sensaciones innecesarias. Reconozco que me ha costado aprender a pensar y hacer uso de mi cerebro. Soy un poco impulsiva (o muy impulsiva). Al principio pensar, se convirtió en un trabajo duro y agotador, pero cada vez trato de ejercerlo más. Aún me equivoco, pero aprovecho a aprender de las experiencias positivas y negativas.
Ser nosotros la “varita mágica”, nos da la capacidad para poder pensar antes y poder evitar una situación. Pero, también nos da el poder para ejecutar algo que queremos como por ejemplo: para pasar un tiempo lindo en familia, amigos, disfrutar de la vida y poder lograr lo que queremos en nuestra vida personal y laboral. Es fácil, solo necesitamos ánimos, disposición y nuestra varita mágica (que somos nosotros mismos ) para realizarlo. ¡Nosotros tenemos ese poder!
La experiencia me ha demostrado que el tiempo de la vida es corto, que no sabemos cuándo la vida termina, eso solo lo sabe Ds. Pero así mismo también he aprendido que solo nosotros tenemos la capacidad de vivir el día a día como queremos, de ser agradecidos con lo que tenemos, de valorar quienes somos y los que están a nuestro alrededor; de ser buenos seres humanos, de pedir perdón cuando nos hemos equivocado, de darle paz a nuestra alma.
Nosotros somos responsables por nuestra felicidad y no hay que ser el más rico o el más pobre para ser feliz. Solo debemos hacer uso de nosotros mismos para activar “la varita mágica”. Obvio, la vida no es LALALALAND. Se presentan y se presentarán momentos difíciles en la vida que no podemos resolver mágicamente ni echar el tiempo para atrás para evitarlos , pero sí podemos tratar de encontrar hasta en los momentos más difíciles una pequeña luz que nos traiga paz.
Así soy yo, Denise